martes, 23 de septiembre de 2025

Moonrise

 


El día de hoy me gustaría hablar de una serie que ha generado un pequeño murmullo en la comunidad, pero que, sorprendentemente, no ha recibido la atención que merece. Hablamos de Moonrise, la reciente producción de Wit Studio que se estrenó hace algunos meses y que, para muchos, ha pasado completamente desapercibida.

   Estamos ante una serie con gran producción, genial animación y buena historia, pero prácticamente no fue promocionada por Netflix en el periodo de su estreno. Es un misterio que ha dejado a muchos rascándose la cabeza. La famosa plataforma es conocida por sus campañas de marketing masivas, especialmente por sus producciones originales. Series como Arcane, Cyberpunk: Edgerunners o Scott Pilgrim Takes Off tuvieron una promoción que pudimos ver en todas partes: tráilers, redes sociales, anuncios en la propia plataforma… Pero con Moonrise el silencio ha sido casi total.

   Las teorías son varias. Algunos sugieren que Netflix podría haber decidido enfocarse en otras producciones más grandes o de géneros más populares. También existe la posibilidad de que hayan tenido problemas de presupuesto para el marketing o que, simplemente, no tuvieran mucha confianza en el éxito comercial de la serie a pesar de la calidad que la producción tiene. Incluso se ha dicho que pudo haber habido diferencias entre la plataforma y Wit Studio, el estudio que produjo la serie, por lo que Netflix pudo haberla estrenado sin promoción solo para cumplir con los contratos. Sea cual sea que haya sido el problema, el director en su momento pidió ayuda para dar a conocer la serie entre los fanáticos del anime y que ésta no muriera en el olvido, aspecto que ha llevado a las recomendaciones del boca a boca.

   Ambientada en un futuro cercano donde la colonización de la Luna es una realidad, la historia nos sumerge en un conflicto entre la Tierra y su satélite natural. Un grupo de soldados de élite de la Tierra es enviado en una misión a la Luna para detener a un líder independentista que amenaza la paz. La trama se desarrolla con un ritmo emocionante y trepidante, combinando acción, ciencia ficción y dilemas morales que buscan mantenernos pegados a la pantalla.

   Creada por Tow Ubukata, uno de los mejores guionistas del anime actual, la serie toma prestada una premisa muy antigua: la colonización de la Luna por parte de la humanidad y luego la búsqueda de independencia de ésta frente a la Tierra. A partir de ahí, el espectador disfrutará de acción sumamente entretenida, una trama que advierte de los riesgos del control total de la IA, así como de personajes moralmente ambiguos que cambiarán de bando en busca de un futuro mejor. En esta línea, estamos ante una historia de acción y ciencia ficción muy bien llevada cuya animación sobresale por su gran calidad para transportarnos a un futuro en la Luna.

   Pero también estamos ante una moderna space opera en la que las batallas espaciales son fluidas y visualmente impactantes, sin dejar de mencionar el agradable diseño de personales. Además, el guión inspirado en la trama de Tow Ubukata es sólido y por momentos complejo ofreciendo personajes desarrollados que nos harán conectar con sus luchas y motivaciones.

   En conclusión, Moonrise es una joya oculta de Netflix que, si no fuera por el boca a boca, habría caído en el olvido. Quedan los lectores de este blog enterados para darle una oportunidad y descubrir por qué esta serie de ciencia ficción está empezando a ganar adeptos. Para los fanáticos de la acción, el drama y una historia bien contada, esta historia es parea ustedes.

 


jueves, 11 de septiembre de 2025

Your Forma

 


El subgénero del cyberpunk ha evolucionado mucho, pero pocas veces  encontramos nuevas propuestas que logren combinar la estética futurista con una trama de detectives que valga la pena disfrutar. Por desgracia, no es el caso de Your Forma, serie de anime que ha pasado un tanto desapercibida y que falla al pretender ser la nueva obra maestra en este subgénero. Basada en la novela homónima de Kyo Shirodaira, esta serie aparece en pantalla como una nueva apuesta dentro de la ciencia ficción en un mundo sobrecargado de isekais.

   La premisa nos sitúa en un futuro alternativo en donde la tecnología “Your Forma” se ha convertido en una parte indispensable de la vida. Dicha tecnología, integrada en el cerebro, permite a las personas comunicarse, procesar información y hasta realizar acciones complejas con una velocidad asombrosa. Sin embargo, como toda gran innovación, también ha traído consigo nuevos y complejos crímenes.

   Aquí es donde entra nuestra protagonista, la brillante cyber-inspectora Echika Hieda, una experta en resolver casos relacionados con la Your Forma. A lo largo de la serie, seguimos a Echika mientras desentraña crímenes que van desde robos de datos hasta asesinatos, todo con la ayuda de su peculiar compañero, Harold Luciano, un androide (Amicus en la serie) que ha sido especialmente adaptado para asistirle.

   Llama la atención  la dinámica entre Echika y Harold. Ella es una detective fría, metódica y obsesionada con la lógica, mientras que Harold es una inteligencia artificial con una personalidad sorprendentemente humana y, a veces, un tanto sarcástica. La química entre ambos es el motor de la historia. Sus diálogos son agudos y llenos de tensión, y su relación se desarrolla de manera gradual y creíble, convirtiéndolos en un buen dúo a seguir en la serie.

   Sin embargo, el gran problema del anime es que su historia jamás termina de despegar. Los casos, si bien por momentos crueles, nunca terminan de ser memorables y el tono ligero no ayuda lo suficiente. De la misma forma, Echika y Harold, si bien son detectives más que competentes, resultan por demás demasiado torpes y lentos para reaccionar ante las amenazas físicas. Harold no puede pelear debido a su programación, mientras que Echika se queda tiesa frente a cada amenaza: por ello, resulta cargante que en cada episodio es fácilmente secuestrada y tiene que ser rescatada a cada rato por el resto de los personajes.

   La historia, de acuerdo con algunos críticos, resulta muy similar a la serie de anime Psycho-pass, no obstante, no cuenta con la acción ni los casos tan interesantes y adultos de aquella serie. De hecho, Your Forma recuerda mucho más en estilo a Ghost in the Shell, aunque quedando solamente como una pobre emulación de esta última. Del mismo modo, la trama bebe mucho de las historias detectivescas y robóticas del escritor estadounidense Isaac Asimov, especialmente por la presencia de las tres leyes de la robótica que guían el comportamiento de los robots. Así, el anime tampoco logra homenajear ni mantener el estilo de Asimov, lo que la convierte en cierto punto en una serie fallida que queda abierta para una segunda temporada que puede que nunca llegue.

   En definitiva, Your Forma falla como historia al emular pobremente otras historias que ya hemos visto antes. Su animación es pulida aunque torpe para las escenas de acción,  mientras que la banda sonora es ambiental y atractiva hasta que nos damos cuenta de que también busca emular la banda sonora de Ghost in the Shell. Si bien los casos son intrincados, las revelaciones apenas y son impactantes, dejando al espectador con un mal sabor de boca.

    


domingo, 31 de agosto de 2025

Blame!


En esta ocasión continuamos con las obras adaptadas al anime del mangaka Tsutomu Nihei, quien a mi parecer se sigue presentando como uno de los grandes autores de la ciencia ficción japonesa. Las historias de este autor no adentran en el espacio profundo, en mundos futuristas o en otros mundos con historias que si bien no siempre son obras maestras, sí consiguen mantener al lector y espectador en su asiento transportándolo a fascinantes mundos lejanos. Si bien la vez anterior ya comentábamos la serie Sidonia no Kishi, en esta ocasión toca el turno a otra de sus obras más interesantes: Blame! (2017).

   En el vasto y a veces abrumador catálogo de Netflix se esconde una pequeña joya cinematográfica que merece la pena ser descubierta. La película que ahora comentamos está dirigida por Hiroyuki Seshita y nos transporta a un futuro tan desolador como fascinante. Así, para quienes sean fanáticos de la ciencia ficción, el cyberpunk y las atmósferas opresivas, esta película no se la pueden perder. 

   La trama se desarrolla en La Ciudad, una mega tumba inmensa de estructuras interconectadas que se expande sin fin en todas direcciones. Los pocos humanos que quedan viven en las sombras acosados por los Constructores, robots automatizados que, tras perder su propósito original, eliminan cualquier forma de vida que no tenga los "genes de conexión a la red". El protagonista, Killy, un enigmático viajero con una poderosa "Pistola de Emisores de Gravedad", busca incansablemente a un humano con esos genes, quien será la clave para detener la expansión de La Ciudad y salvar lo que queda de la humanidad. 

   Uno de los puntos fuertes de la película es su estilo visual. Como en todas las adaptaciones de la obra de Tsutomi Nihei, la animación 3D, con frecuencia controversial en el mundo del anime, funciona muy bien para transportarnos a ese mundo futurista y cerrado. Aunque pueda chocar al principio, la dirección artística logra capturar la estética lúgubre, industrial y cavernosa del manga original. Cada rincón de La Ciudad se siente vasto, peligroso y lleno de una belleza extraña. Las escenas de acción son fluidas y brutales, con Killy desatando el poder de su arma contra hordas de robots creando un gran espectáculo visual.

   Blame! no es una película para todos. Su narrativa es minimalista y su diálogo muy breve por momentos. La historia también se cuenta a través de imágenes, el sonido y la atmósfera. Este enfoque, fiel al manga, sumerge al espectador en un mundo de desesperanza y supervivencia. La película genera una constante sensación de claustrofobia y opresión, con la música y el diseño de sonido trabajando en conjunto para crear una experiencia más que inmersiva. 

   Más allá de ser una buena adaptación, Blame! es una obra de ciencia ficción que destaca por su originalidad. No sigue las convenciones narrativas habituales, lo que la convierte en una propuesta refrescante. Para quienes disfruten el cyberpunk en obras como Akira o Ghost in the Shell, la estética y el tono de la película resultarán fascinantes. Es una cinta que busca hacernos pensar y nos dejará con ganas más el universo creado por Tsutomu Nihei.

   Un breve apunte que es necesario hacer es que existe una adaptación previa en formato ONA con episodios muy breves y casi sin diálogo. Esta pequeña producción busca transportar al espectador al mundo propuesto por el mencionado mangaka. No obstante, la gran brevedad de esta serie hace imposible contar una historia coherente y solo se queda como una promoción para leer el manga.

   En conclusión, si buscan una película de anime que los saque de lo convencional y les ofrezca una buena experiencia visual, esta cinta es para ustedes. Es una obra distópica fácil de encontrar en Netflix y que, pese a su corta duración, busca dejar una huella profunda y demuestra que el anime de ciencia ficción tiene aún mucho que ofrecer. 

 


lunes, 18 de agosto de 2025

Sidonia no Kishi

 


En las siguientes entregas de este blog comentaremos las adaptaciones al anime del mangaka Tsutomu Nihei, autor centrado especialmente en la ciencia ficción y que le encanta hablar de grandes, muy grandes estructuras en sus ficciones (por algo trabajó en el sector de la construcción). Para quienes busquen opciones interesantes en este género  con toques de originalidad, las obras de este autor están hechas para ustedes. Por lo mismo, en esta ocasión olvidémonos de los tropos comunes y preparémonos para un viaje espacial de lo más curioso: Sidonia no Kishi.

   La historia nos lleva a un futuro lejano, más de 1000 años después de que la Tierra fuera destruida por una misteriosa especie alienígena conocida como los Gauna. La humanidad sobrevive a bordo de gigantescas naves espaciales construidas a partir de fragmentos del planeta, como la Sidonia. Aquí conocemos a Nagate Tanizake, un joven  y peculiar piloto de mechas que se unirá a la lucha por la supervivencia de la especie humana.

   Una de las características más notables de la serie es su nada desagradable CGI. El estudio Polygon Pictures optó por un estilo 3D que, aunque al principio puede parecer inusual, termina siendo su mayor fortaleza. Los movimientos son fluidos y las peleas de mechas contra Gauna son espectaculares. El estilo también ayuda a crear una atmósfera claustrofóbica y oscura que busca sumergirnos en la historia.

   Más allá de la acción y los efectos visuales, Sidonia no Kishi es un anime que nos invita a pensar. La serie explora temas como la supervivencia, la moralidad, y lo que significa ser humano en un escenario al borde del colapso. Los personajes son complejos y su universo está lleno de detalles que harán que queramos conocer más del universo de Tsutomu Nihei.

   Para los amantes del sci-fi, los viajes espaciales generacionales están a la orden del día. En la gigantesca estructura espacial, los personajes buscan lidiar con sus conflictos personales mientras que están atentos a nuevas batallas. En ese futuro, las personas son fotosintéticas y prefieren ponerse extremidades robóticas antes que lidiar con miembros biológicos débiles. En este ambiente lleno de ciudades inmensas, la serie se siente realmente alienígena dada la naturaleza extraña y amorfa de los enemigos Gauna. Para el caso de los pilotos y sus mecha, la historia se aleja de clichés clásicos: los robots no reaccionan al amor ni tienen vida propia, dado que todo depende únicamente de la pericia de los pilotos.

   Algo curioso es que la historia propone la superioridad del ser humano frente a otras especies inteligentes, por lo que el diálogo no es posible. En un momento determinado, se propone una comunicación con los Gauna, más los directivos de la nave Sidonia, siguiendo este supuesto de superioridad, rechazan toda conversación. Así, este anime se inspira en muchas ideas de la ciencia ficción militarista estadounidense y apela a nociones tomadas directamente de autores como Robert A. Heinlein o Larry Niven por mencionar solo unos cuantos escritores.

    En definitiva,  estamos ante una historia de ciencia ficción con toques de terror, batallas de mechas épicas y un universo profundo. Si bien su carga ideológica resulta curiosa,  en general la serie cumple su cometido como buena ciencia ficción y como una joya oculta que vale la pena descubrir.

 


martes, 29 de julio de 2025

The Twelve Kingdoms / Los doce reinos

 

Poster oficial The Twelve Kingdoms

Continuamos con series de anime épicas y de alta fantasía complejas que desafíen al espectador con dilemas morales y ofrezcan un buen desarrollo de personajes. Para ello es necesario (re)descubrir The Twelve Kingdoms (también conocida como Juuni Kokuki), una gran serie del anime de principios del milenio que está un poco olvidada pero que vale mucho la pena. Para los fanáticos de un isekai mucho más adulto, esta serie es para ustedes.

  Lanzada entre 2002 y 2003, la serie que ahora comentamos se basa en una aclamada serie de novelas de fantasía de Fuyumi Ono. A diferencia de muchas producciones contemporáneas, esta historia no se apoya en trucos fáciles ni en la gratificación instantánea. En su lugar, ofrece una narrativa profunda y madura que explora temas como la responsabilidad, el liderazgo, la identidad y el significado de la justicia.

   La historia comienza con Yoko Nakajima, una estudiante de secundaria que se siente alienada y fuera de lugar en su propia vida. De repente, un misterioso hombre con cabello plateado llamado Keiki la arrastra a un mundo completamente diferente: los Doce Reinos. En esta línea, este no es un isekai donde la protagonista se convierte en una heroína todopoderosa de inmediato. Al contrario, Yoko se encuentra sola, asustada y perseguida en un entorno hostil donde la magia y las criaturas míticas son parte de la vida cotidiana.

   Lo que sigue es un viaje de autodescubrimiento brutalmente honesto. La protagonista debe aprender a sobrevivir, a confiar en sí misma y a tomar decisiones difíciles que la forzarán a madurar a un ritmo acelerado. La serie no se limita a su historia: también nos presenta a otros personajes  con sus propios arcos narrativos complejos ofreciendo diversas perspectivas sobre la vida en los Doce Reinos y los desafíos de sus propios roles.

   En esta historia, el espectador debe olvidarse de las tramas predecibles, dado que se encuentra frente a una historia intrincada de política, mitología y desarrollo personal. Cada arco narrativo se siente significativo y contribuye a la riqueza del universo fantástico propuesto. Asimismo, la transformación de Yoko de una adolescente insegura a una líder fuerte y sabia es uno de los puntos fuertes. No obstante, no es la única: personajes como Shoryu, Enki, y la propia Suzu tienen sus propios viajes conmovedores.

   El universo de los Doce Reinos es vasto y meticulosamente diseñado, con una mitología única inspirada en la China milenaria, sistemas de gobierno fascinantes y criaturas fantásticas dignas de interés. Por otra parte, se tocan temas maduros como la tiranía, la corrupción, el deber, la lealtad y la búsqueda de un propósito. Así, se trata de un anime que invita a la reflexión.

   No podemos olvidar dos aspectos técnicos cruciales: la animación y la banda sonora. Aunque la serie es de principios de los 2000, la calidad de la animación es notable para la época, especialmente en el diseño de personajes y las escenas de acción. Del mismo modo, la banda sonora, compuesta por Kunihiko Ryo, es simplemente espectacular y eleva cada momento dramático y épico.

   Pero como siempre decimos en este blog, no todo es miel sobre hojuelas. La historia nos ofrece diferentes arcos en donde conocemos a toda clase de personajes que solo expanden el universo pero a su vez ofrecen nuevos misterios. El gran problema de la serie es que es inconclusa dado que el estudio suspendió su producción debido a problemas técnicos y de audiencia. Así, la trama continúa luego con unas cuantas OVAs que no aportan gran cosa y dejando al espectador con la alternativa de buscar las novelas originales si es que sabe leer inglés o japonés.   

   En resumen, The Twelve Kingdoms no solo es una serie de anime, sino una experiencia que busca marcar al espectador. Se trata de un testimonio de lo que el género de la fantasía y el isekai pueden lograr cuando se abordan con seriedad y creatividad. Este clásico olvidado de los años 2000 vale la pena ser recuperado para disfrutar de su historia.

 

 


martes, 15 de julio de 2025

Orb: On the Movements of the Earth

 



Cuando uno lleva años viendo anime es muy común que uno se harte de cierto tipo de series que se estrenan cada temporada. De hecho, cada vez se repiten las mismas historias y al espectador no le queda de otra más que fijarse en los estrenos para así rastrear aquellas series que dan buena pinta y que prometan ser algo diferente. Para el caso de la serie que ahora comentamos, ésta se presenta como una gran sorpresa cuya temática y estilo es totalmente diferente a lo que uno se encuentra con normalidad en las plataformas.

   Desde su anuncio y las primeras críticas, Orb: On the Movements of the Earth generó una buena expectativa entre otakus e incluso entre el público que no está tan adentrado en el medio. Y a decir verdad, quienes ya hemos podido disfrutar de ella hemos concluido que no decepciona para nada. Así, esta serie original nos transporta a un mundo donde la comprensión del movimiento planetario y sus implicaciones va directo a los orígenes de la ciencia y al terreno de la filosofía.

   La premisa de la serie que ahora comentamos resulta cautivadora y refrescante. La historia explora los finales de la Edad Media en donde la religión tenía la última palabra sobre el conocimiento natural y cualquier teoría alternativa se presentaba como una herejía. En esta especie de ficción histórica, la inquisición tortura y elimina a aquellos herejes que no estén apegados a la palabra escrita de la Biblia y aquello que es aceptado como ciencia.

   Los personajes que la serie nos presenta son complejos y multidimensionales, cada uno con sus propias motivaciones y secretos que se entrelazan a través de una historia generacional. Asimismo, la trama no teme abordar temas profundos como la ciencia contra la fe, la censura, el poder del conocimiento y la capacidad humana para adaptarse o resistir al cambio. Para los fanáticos del anime con tramas complejas y pausadas que no requieren acción desmedida, Orb será un festín intelectual para ellos.

   Visualmente hablando, la serie ha recibido algunas quejas en cuanto a que su animación es limitada pese a que detrás de ella está el estudio Madhouse. No obstante, esta crítica resulta desfasada dado que la historia no requiere una animación grandilocuente ni perfecta para contarnos su pausada e interesante historia. Al contrario, la serie cuenta con una animación fluida y detallada que realza cada escena. Los diseños de los personajes son distintivos, y los paisajes, desde sus entornos naturales y medievales, resultan de gran belleza. Dado que que el grueso de la trama es pausada y de mucha reflexión y diálogo, insisto, la serie no requiere una animación tan apabullante como la que requieren otras series de más acción o de construcción de mundos. Así, la paleta de colores que se utiliza contribuye a crear una atmósfera única, a menudo melancólica y misteriosa, perfecta para la ficción histórica que se cuenta.

   La banda sonora merece una mención especial, dado que ésta resulta envolvente y se fusiona perfectamente con la narrativa, amplificando la emoción y el misterio en cada momento. Desde melodías sutiles y contemplativas que sugieren la inmensidad del cosmos hasta piezas más intensas que acompañan los momentos de tensión, el soundtrack es un elemento crucial que eleva la experiencia.

   Las generaciones transcurren, pero los temas de estudio de la astronomía persisten pese a la mano de hierro de la iglesia. De hecho, esta institución sale muy mal parada en la serie por su cerrazón y falta de escrúpulos, mientras que la serie se aboca en la importancia de la ciencia y, especialmente, de la astronomía. Un aspecto que agrada desde una perspectiva histórica es que se hace alusión a la teología natural y la filosofía natural, dos visiones del mundo que existían en aquella época y que tenían sus propias ideas: la primera como el estudio erudito y teológico de la naturaleza, vista ésta última como la prueba fehaciente de la existencia de Dios; en cambio, la segunda se presenta como antecesora de la astronomía, la física y las matemáticas que, en ese entonces, estaba más que fusionada con la filosofía. Dichas posturas se conjugan en la historia de una forma amena y elegante.

   Por otra parte, la serie discute a lo largo del camino el papel y la necesidad de la fe como elemento que le da sentido a la existencia humana. Cada generación que transcurre permite conocer diferentes posturas sobre la fe más allá de la religión ofreciendo debates y discusiones sobre la existencia de Dios. Cada personaje cuenta con su propia interpretación, ya sea creyente o ateo, desarrollando elaborados diálogos en los que la teología y la ciencia pueden ser aliadas o incluso enemigas acérrimas. En este sentido, el visionado de esta serie hace pensar que una historia de este tipo sería casi imposible de ver en las producciones estadounidenses, especialmente en el cine.

   En definitiva, Orb no solo en sun anime más, sino que se presenta como una experiencia que desafía la percepción y celebra la búsqueda del conocimiento. Sin duda, se perfila como uno de los mejores animes recientes y un firme candidato para entrar en los anales de las mejores series de anime. Si bien no es una serie para aquellos que disfrutan de las peleas y la acción, su ritmo pausado y reflexivo ofrecerá temas realmente interesantes para quien le dé una oportunidad.

 


miércoles, 9 de julio de 2025

The Deer King / El Rey Ciervo

 

alt= "Poster de la película The Deer King con los personajes"

En esta ocasión regresamos a los animes que están inspirados en la obra literaria de la escritora japonesa Nahoko Uehashi, misma que ha ofrecidos mundos fantásticos con temática asiática y un enfoque antropológico. En entradas anteriores hemos comentado sus dos grandes adaptaciones al anime: Erin The Beast Player y Moribito: Guardián del Espíritu Sagrado. Si bien resultan ser dos producciones de gran interés, la tercera y última adaptación de una de sus sagas en formato de película no logra acercarse a la magia de los mundos que la autora ha creado. Así, The Deer King (2021), se presenta como una adaptación fallida que rompe la racha de interesantes adaptaciones de Uehashi.

   The Deer King (Shika no O) es una cinta animada que busca cautivar al espectador desde el primer momento. Dirigida por Masashi Ando y Masayuki Miyaji, y producida por Production I.G., esta película busca ofrecer una gran experiencia visual. La historia nos transporta a un mundo donde un imperio dominante, Zol, ha conquistado la mayoría de las tierras dejando solo al reino de Aquafa independiente pero bajo constante amenaza. Así, conocemos a Van, un guerrero solitario  que fue capturado  y obligado a trabajar en una mina de sal. Una noche, un misterioso brote de una enfermedad mortal conocida como fiebre negra asola la mina, matando a todos, excepto a Van y a una niña pequeña, Yuna, a quienes el destino parece haberles perdonado.

   Lo que sigue a continuación es una odisea de supervivencia. Mientras Van y Yuna intentan encontrar su lugar en un mundo hostil son perseguidos por las fuerzas de Zol, quienes creen que Van podría ser la clave para entender la enfermedad. En este sentido, la película teje una narrativa compleja que explora temas como la libertad, la supervivencia, la enfermedad y la naturaleza de la conexión humana. La relación entre los dos protagonistas es el corazón de la historia, una conexión inquebrantable que se forja en medio de la adversidad.

   Con unos ligeros toques fantásticos, la animación es uno de los puntos fuertes de la historia. Production I. G. entrega un trabajo casi impecable, con diseños de personajes detallados, paisajes exuberantes y secuencias de acción fluidas. La atención al detalle en la fauna y la flora, así como las expresiones faciales de los personajes, resultan bien logrados. Asimismo, los paisajes, inspirados en la naturaleza japonesa, resultan agradables como escenario de la historia.

   Pero más allá de la belleza visual, el guión de la cinta resulta desangelado y provoca que la historia nunca despegue. Estamos ante una historia de aventuras, una reflexión sobre cómo las sociedades humanas reaccionan ante una crisis, el papel tan importante de la ciencia y la medicina, así como la lucha por mantener la propia identidad en un mundo en constante cambio. Todo lo anterior debería funcionar en una historia de este estilo que adapta los libros de una autora de renombre, no obstante, la falta de buenos giros y un desarrollo de la historia sin encanto provoca que incluso el final, que prometía ser épico, resulte más que insulso.

  Pese a ello, para quienes disfrutan historias más contenidas con personajes complejos y un toque de fantasía oscura, esta película es para ustedes. Su trama hace numerosos guiños a fantasías clásicas mientras busca su propio ritmo. Si bien es una historia un tanto contemplativa, se consigue cierto desarrollo de personajes que dejarán satisfechos a quienes disfruten de este elemento. Sin embargo, como película no siempre funciona e invita al lector a adentrarse en los libros originales (muchos de los trabajos de la autora original están traducidos al inglés).

   En definitiva, The Deer King cuenta con una gran animación y algunos momentos interesantes para los amantes del fantástico. Pese a ello, su guión y la falta de inspiración en la película puede que aleje a muchos espectadores.