Esta semana quiero recomendarles una joya de la animación francesa: Gandahar.
Basada en opera prima del escritor francés Jean-Pierre Andrevon, René Laloux se asoció con Philippe Caza, uno de los más grandes maestros del cómic francés, para ofrecer una historia distinta, interesante, amena, y con una animación soberbia y extraña (Muchos amigos incluso han dicho que de aquí es donde James Cameron sacó algo de la estética de su película Avatar).
Cuando esta cinta que hoy les comento llegó a los Estados Unidos, detalles de la trama, la música y la animación fueron modificados. Se agregó una cortinilla introductoria al inicio de la misma con una frase del famoso escritor de ciencia ficción Isaac Asimov. De la misma forma, se incluyeron las voces de personajes famosos como Glenn Close y Penn Jilette (el famoso mago parlanchín del dúo Penn & Teller).
Así, esta versión estadounidense se llamó Light Years (Años luz), nombre que en realidad no nos dice nada.
En esta ocasión les ofrezco la versión original, la cual sin lugar a dudas no dejará de nueva cuenta indiferentes a los fans de la ciencia ficción (la estética para delinear cómo sería la vida en otro planeta es simplemente deliciosa).
Hay días en que uno anda con el suficiente ocio para
chutarse lo que sea. Así me pasó hace poco cuando mi incredulidad
desapareció, momento idóneo para ver esta extraña película. No he leído el
manga, así que no se qué tan apegado esté la historia que se puede disfrutar en
pantalla.
Gyo cuenta la historia de tres chicas que
se encuentran de vacaciones: una de ellas es hermosa pero adicta al sexo, la
segunda es gordita y con baja autoestima, y la tercera es como la chica más
centrada, quien a su vez ya está planeando casarse.
Pero en una de
esas, algo extraño sucede en todas las ciudades japonesas: toda clase de organismos
marinos de alguna manera han podido desplazarse por tierra al grado de invadir
y colapsar las urbes. De aquí en adelante, la chica centrada saldrá en busca de
su prometido a lado de un joven freelancer
que le ha ofrecido su ayuda.
A primera vista, la historia de terror es realista y fría, pero cuando invaden los peces, tal
parece que estuviéramos viendo la versión animada de Sharknado.
Conforme avanza
la trama, los personajes descubrirán que un extraño microorganismo manejado
secretamente por el ejército ha infectado no sólo a todos los animales, sino
además a millones de personas.
Pese a los
esfuerzos de los protagonistas, el caos es inminente: el mundo está condenado,
y no quedará más que tratar de buscar refugio y resignarse ante la llegada del
apocalipsis.
La historia por
momentos es boba, exagerada, jalada de los pelos. Sin embargo, el final aparece
frente al espectador como lo más atractivo de la cinta.
En resumen, una
especie de terror medio chafa pero que sorpresivamente presenta un final atractivo
y perturbador.
En esta ocasión quiero recomendarles este valioso
cortometraje. Cómo fue salvado Wan-Fo
(1987) es la marca de la última etapa de Laloux, en la cual este animador
francés se acercó a algunos de los maestros del cómic francés para llevar a
cabo sus últimas producciones.
Basado en el
relato del mismo nombre de la brillante escritora francesa Marguerite
Yourcenar, la historia nos cuenta una ficticia pero bella leyenda china que no
les dejará indiferentes.
Si les gusta la
animación y lo oriental, este cortometraje es para ustedes.
Hay ocasiones en las que uno se lleva grandes sorpresas
cuando compra una serie de animación japonesa. A veces creemos que si hay
robots gigantes, entonces estaremos chutándonos la enésima versión de la
batalla clásica (y algo desgastada) entre estos cachibaches.
Pero para mi
sorpresa, Bokurano aparece como una serie refrescante, amena, curiosa, humana,
y sobre todo, cautivante y aterradora.
Nos encontramos
en una especie de guerra entre las Tierras de miles de universos paralelos.
Cada Tierra debe pelear y ganar doce batallas para que sus habitantes puedan
sobrevivir, de lo contrario, su mundo y universo se evaporará. Es
algo así como una selección natural obligada entre Tierras de distintos
universos.
Luego de que un
grupo de niños que andan en unas vacaciones de verano conocen a un extraño personaje
que los invita a participar en un juego, ellos descubrirán que se han
convertido en los futuros controladores de un robot gigante (un armatoste de
casi medio kilómetro de altura). Poco a poco, tendrán que aprender a utilizar
el mecanismo de control para comenzar a participar en las batallas.
La serie no sólo
es un reflejo de la vida de diversos personajes. A través de sus amigos, de sus
personalidades y de sus traumas, conoceremos sus vidas personales antes de que
les llegue el turno para manejar el robot, pelear contra otros robots y así
sobrevivir un día más.
Hay personajes
entrañables. En lo personal me perturba aquel chico cuyo padre es un empresario
sin escrúpulos que busca lucrar a como dé lugar con las consecuencias de las
batallas.
Otro personaje
que llama la atención es una de las niñas, quien mantiene relaciones sexuales
con uno de sus profesores. Su historia nos lleva a una de las injusticias de la
vida, ya que el maestro que supuestamente la quería en realidad es una especie
de depravado que se dedica a espiar y abusar de sus alumnas.
Hay muchos aspectos
que perturban al espectador. El hecho de que por más esfuerzos que se hagan, no
es posible liberarse de la obligación de pelear las batallas. También llama la
atención la crítica que se hace a la avaricia de las grandes compañías: pese a
que el riesgo de que termine el mundo es inminente si los niños pierden una batalla, los empresarios buscan conocer la naturaleza del robot para así lucrar
con ello.
En resumen, una
poderosa serie que se desvía de las temáticas tradicionales y nos ofrece una
trama que bien cautivará al espectador por la idea de la lucha entre los
universos paralelos o simplemente por las historias de los
personajes.
En esta ocasión quiero recomendarles Los amos del tiempo, película de 1982 realizada por René Laloux junto con Möebius, uno de los grandes maestros del cómic en Francia.
Con un estilo musical de la época (la música electrónica recién andaba haciendo de las suyas), la cinta nos cuenta la historia de Piel, un niño que ha quedado huérfano en un extraño mundo alienígena. Gracias a un comunicador que le dejó su padre antes de morir, el niño consigue comunicarse con una nave cuyos tripulantes no dudarán en ir en su auxilio.
Así pues, el final de esta cinta en muy conocido y no dejará indiferentes principalmente a los fans de la ciencia ficción. Aquí se los dejo en inglés (no pude encontrar una versión con subtítulos en español).
Se habla mucho de los fanáticos de la animación japonesa en occidente, o mejor conocidos como los otakus. Y pues bien, esta semana quiero recomendarles este artículo que explora desde varias perspectivas la naturaleza de esta subcultura.
Si queremos pensar a la cultura japonesa contemporánea, no podemos ignorar a la cultura otaku. Aún más, lo que constituye en esencia a nuestra época se manifiesta de manera particularmente clara en esta cultura juvenil en perpetuo crecimiento desde los años 80' en Japón. Este fenómeno representa hoy día un mercado colosal y se extiende con rapidez al resto del mundo. En el presente trabajo se comienza por exponer la magnitud del fenómeno a nivel comercial. Posteriormente, explicamos que lo que constituye en esencia a las denominadas estructuras posmodernas de la sociedad actual, se observa claramente en esta cultura. Finalmente, explicamos los factores sociales que subyacen en el otakismo japonés.
Esta semana, siguiendo con el conteo de las películas del director de animación francesa René Laloux, quiero recomendarles Planeta salvaje. Basada en la novela Oms en série de Stefan Wul, este es el primer largometraje y la producción más conocida de Laloux.
Aquí encontraremos nuevamente a Roland Topor con sus dibujos recortados con toque surrealista, disfrutaremos de una historia que realmente nos hará reflexionar sobre nuestra relación con los animales, quedaremos hipnotizados con la música del músico instrumentalista Alain Goraguer y, finalmente, disfrutaremos de una cinta psicodélica que representa la época en la que se produjo.
Así pues, sin más preámbulos, los invito a ver o a conseguirse esta cinta de ciencia ficción que ya es considerada de culto.